Papelillo amarillo que se pega por un lado

Tengo cosas que contar, no son importantes, no dejarán huella, no son de esas que te hacen pensar, sólo cosas que, a veces, cuando no tienes nada mejor que hacer piensas, vienen a la cabeza, revolotean un rato y te dejan un papelillo de esos amarillos que se pegan por un lado con una pequeña anotación que dice "recuerda esto, tienes que escribirlo, si no te olvidarás de ello".

Y lo que pasa con los papelillos estos amarillos que se pegan por un lado es que el pegamento ese que tienen no es eterno, de hecho alguno no dura ni medio minuto, y, claro, se caen, se olvidan y a veces fastidia un poco ser una desmemoriada para cosas que pueden llegar a ser productivas, porque mi cabeza es un pozo sin fondo y no los puedo recoger del suelo.